Debido a la posible construcción de un oleoducto, decenas de indios norteamericanos y vaqueros se manifestaron en la explanada del Capitolio de Washington DC, para impedir la ejecución de la obra.

El oleoducto conectaría las arenas bituminosas de Canadá con el estado estadunidense de Nebraska, y de acuerdo con los manifestantes, afectaría de manera considerable el medio ambiente.

Con su tradicional indumentaria y montados a caballo, los miembros del grupo Cowboy Indian Alliance exigieron al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no aprobar la construcción del oleoducto.