El Gobierno de la República ha honrado su palabra de no mezclar cuestiones políticas con temas de seguridad, expresó Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación.

En su comparecencia ante los integrantes de las comisiones de Seguridad y de Gobernación, el funcionario federal dijo que en las acciones en materia de seguridad, no hay menos información pero sí hay menos espectáculo, y, en referencia a la administración federal panista, Osorio Chong dijo que “en muchos de esos espectáculos llevaron a que varios de esos criminales tuvieran que salir porque se afectaban sus derechos humanos”

Refirió que de 103 mil personas que detuvieron en la administración de Felipe Calderón, sólo tres mil fueron sentenciadas “yo no creo que sea porque no son criminales, sino porque este tipo de acciones espectaculares de ponerlos en la televisión y que en estas consideraciones de derechos humanos las ponían en libertad al otro día, y tenemos un caso muy sonado hace poquito (en referencia a Israel Arzate Meléndez, acusado de participar en la matanza de 15 jóvenes en Ciudad Juárez, Chihuahua, quien será liberado por orden de la SCJN, ante abuso de autoridad por parte del Ejército)”

Añadió que además los 103 mil fueron detenidos por un área de seguridad, la cual los dejaba en manos de otra área, pero sin  información debida, lo que dificultó que tuvieran un debido proceso.

En cuanto a la situación de Michoacán, Osorio Chong confirmó que el alcalde de Santa Ana Maya, Ygnacio López Mendoza, fue asesinado, y aprovechó para decir que “no podemos ponerles un cuerpo de seguridad a cada municipio, a cada presidente municipal;  ellos (los alcaldes) tienen que cooperar mejor para entonces regresar a la seguridad de su municipio; no pueden justificar la no participación  en  que  están  amenazados”.

Refirió que en mayo pasado incursionó mayor seguridad en Michoacán porque “el grado de descomposición de todos los sectores era muy grave”, pero advirtió que no es con más cuerpos de seguridad  como se resolverá la situación.

Respecto al involucramiento de autoridades municipales con el crimen organizado, Osorio Chong dijo que se ha reunido con presidentes municipales y diputados locales, a quienes  “he exhortado a no estar del otro lado y a pedir que vengan a trabajar y decirles que no corran esa línea que es muy fácil y frágil de pasar a ser parte de los delincuentes”.

Expresó que al pegarle a células importantes de la delincuencia organizada, “en su debilitamiento están desplazándose a otro tipo de delitos”.

En su comparecencia, que duró tres horas, dijo que no hay un pacto de silencio sobre la política criminal ni presiones del Gobierno federal hacia medios de comunicación para no hablar de ésta, pero reconoció que “se ha pactado con los grupos de la sociedad civil el modo de dar la información”.

Sobre la intervención telefónica en México por parte de Estados Unidos, el responsable de la política interior del país, refirió que “estamos haciendo un trabajo que nos permita investigar, y le pedí a la Policía Federal si se dio desde la propia Presidencia de la República, alguna filtración, alguna intervención, y lo daremos a conocer, si es que tenemos al alcance dicha información, y si hay algunos también que participaron, que intervinieron, también se dará a conocer”.

Mencionó que a la llegada del Gobierno actual, se revisaron todos los protocolos de seguridad, de todos los canales de información, internos y externos, y se hizo no sólo en la Presidencia de la República, sino en todas las áreas de seguridad.

Aceptó que hubo un momento complejo, difícil, con Estados Unidos al principio de la administración de Enrique Peña Nieto, ya que las agencias de seguridad norteamericanas estaban acostumbradas a tener acceso a diferente información, sin seguir ningún protocolo, pero “lo que les definimos es que las reglas cambiaban” y se estableció una mejor coordinación, por lo que ahora hay claridad de quienes se han acreditado en México.

Remarcó que todas las labores derivadas de la política pública de seguridad y procuración de justicia se han llevado a cabo con estricto apego a los derechos humanos y al marco legal.

Dijo que la política criminal es un medio, más que un fin en sí mismo; “es el camino para fortalecer la gobernabilidad y la convivencia democrática en una sociedad de derechos”.

Ello, apuntó, a partir de diez aspectos: prevención, justicia eficaz, profesionalización y fortalecimiento de los cuerpos de seguridad; evaluación y certificación; transformación del sistema penitenciario; promoción y articulación de la participación ciudadana; cooperación internacional; información que sirva a los ciudadanos; coordinación entre autoridades, y fortalecimiento de la inteligencia.

Adelantó que en breve dará a conocer la creación de una universidad para formar elementos en temas de investigación y en materia policial, cuya primera generación saldrá en cuatro o cinco años.