Gustavo Madero rechazó que la reforma política—electoral  se convierta en bandera o rehén de los  grupos en disputa por la dirigencia nacional del PAN en las próximas semanas y estableció que dicha iniciativa no está a discusión pues al interior del blanquiazul hay acuerdo en “amarrarles las manos a los gobernadores” en los procesos electorales locales.

“Esto no es un rehén, es un objetivo que no ha variado de blindarle las manos, amarrarle las manos a los gobernadores para que no participen ilegalmente en influir en los procesos electorales, uno de los objetivos mínimos que nos hemos planteado y eso no está sujeto a discusión”, atajó.

Madero  reconoció que la reforma política—electoral que presentó su partido, donde se incluye la creación del Instituto Nacional de Elecciones (INE), es ambiciosa pero hay consenso en apoyarla.

“Es una reforma muy ambiciosa, muy completa, la suscribieron todos los senadores y diputados de nuestro partido, la aprobó el Comité Ejecutivo Nacional y esa es la postura del Partido Acción Nacional”, estableció.

Madero recordó que este lunes habrá reunión del Comité Ejecutivo Nacional donde se discutirán los nuevos reglamentos del PAN luego que el IFE aprobó los estatutos a fin de establecer la ruta para la renovación de su dirigencia nacional.

Una vez que  el CEN apruebe estos reglamentos, se convocará al Consejo Nacional, probablemente el 23 de noviembre próximo, para que elija a la comisión encargada de organizar la elección para la Dirigencia Nacional.

Esa comisión será la que marque la convocatoria, los tiempos y los requisitos, para todos los que aspiren a la presidencia nacional del PAN.

Madero reiteró que será hasta que se emita esa convocatoria cuando decida si busca la reelección o no al frente de la dirigencia nacional.

Aunque su gestión termina a principios de diciembre próximo, se prevé que la elección se realice hasta marzo próximo, luego de que el proceso se prolongó  por la aplicación de los nuevos estatutos del PAN donde se establece que ahora la dirigencia de ese partido será electa por la militancia del blanquiazul y ya no por el Consejo Nacional.