Nelson Mandela, en el séptimo arte: la lucha por la libertad


Nelson Mandela es considerado el arquitecto de la transición pacífica de 1994 a una democracia multi racial después de tres siglos de dominio blanco en Sudáfrica. Desde el inicio, su lucha por la libertad ha inspirado a cineastas a documentar la historia de Nelson Mandela desde hace más de 50 años. Esta ocasión hacemos un recuento del legado cinematográfico que Madiba inspiró.
Debutó como actor. Un año después de que Nelson Mandela salió de la prisión de Robben Island en 1990 el director estadunidense Spike Lee lo invitó a participar en su película Malcolm X, en la cual hace una radiografía del activista estadunidense Malcolm Little Norton. Fue entonces que Madiba tuvo su primer y único contacto como actor, con una breve participación de minuto y medio en la que da vida a un maestro.
La imagen de Mandela aparece justo después de que sus estudiantes pronuncian uno a uno la frase “I’m Malcolm X” en referencia al 19 de mayo considerado el Día del activita afroamericano. El sudafricano aparece en un salón de clases con un pizarrón detrás de él para expresar un fragmento de uno de los discursos de Malcolm X:
“Según lo dicho por el hermano Malcolm X: Declaramos nuestro derecho en esta tierra para ser un hombre, un ser humano que tiene acceso a los derechos mismos derechos de todos los seres humanos, a ser respetado como un miembro de esta sociedad, en esta tierra, en este día y tenemos la intención de poner en práctica esto por todos los medios necesarios”, son las palabras que dice Madiba.
Primer filme. Nelson Mandela cobró relevancia en la política desde 1948 cuando se creó el Partido Nacional Sudafricano. Dirigió por un tiempo junto al abogado Oliver Tambo un despacho de abogados comprometidos con métodos no violentos de resistencia pero luego de unos años los movimientos comenzaron a ser armados. Madiba se refugió en Argelia y a su regreso fue arrestado y condenado a cadena perpetua.
El llamado Juicio de Rivonia, que se efectuó de octubre de 1963 a junio de 1964, fue recreado en un documental para la televisión alemana con el mismo título pero en alemán: Der Rivonia-Prozeß (1966). En el documento, el realizador Jürgen Goslar, le concedió el papel de Nelson Mandela a su compatriota Simón Sabela, quien años más tarde participó en otros filmes populares como Oro (1974) y Los dioses deben estar locos II (1989).
Años más tarde se realizó la filmación de un capitulo documental dedicado a la historia de Nelson Mandela, que formó parte de la serie Prisioneros de la conciencia, en la que el actor George Harris, quien años más tarde formó parte del elenco de la saga de Harry Potter, personificó a Madiba.
Ficción. No pasó mucho tiempo para que la figura de Nelson Mandela inspirara historias de ficción en torno a la vida del mandatario. Mandela (1987), un melodrama que cuenta cómo un prisionero logró una masiva influencia sobre una sociedad sofocada por el racismo, bajo la dirección de Philip Saville, fue una producción del canal HBO por la que el actor Danny Glover, quien dio vida al sudafricano, recibió una nominación a los Emmy, en la categoría de Mejor Actuación en un Telefilm.
También se presentó Mandela (1996), nominado al Oscar a Mejor documental, dirigido por Angus Gibson y Jo Menell, fue lanzado cuando los aires de libertad y democracia estaban frescos en Sudáfrica bajo el mandato de Mandela.
En 1997 se dio a conocer otra película para la televisión que ganaría reconocimiento mundial por la actuación del estadunidense de origen bahameño, Sidney Portier (Al maestro con cariño, 1967). El intérprete logró una nominación a los Golden Globe, por su trabajo en Mandela y De Klerk, que aborda el momento en que el presidente blanco de Sudáfrica ordena la liberación de Madiba.
Imagen. En el nuevo milenio, la figura de Nelson Mandela se convirtió en uno de los símbolos de paz alrededor del mundo y en el séptimo arte se realizaron las primeras adaptaciones sobre su vida en la pantalla grande.
Primero con cameos en cintas como el thriller Drum (2004), cuya trama se centra en un periodista que denuncia las injusticias sociales provocadas por el apartheid, en la que el sudafricano Lindani Nkosi interpreta a Mandela y posteriormente, en otros géneros como la comedia en Superhéroes, la película, en la que Howard Mungo crea una parodia del mandatario africano.
Fue hasta el 2007 cuando apareció el filme Goodbye Bafana, que muestra cómo un prisionero llamado Nelson Mandela, personificado por Dennis Haysbert, dio un giro al racismo que hasta los años 90 dominó en Sudáfrica. El filme resultó ganador del Premio por la Paz en la edición de ese año en la Berlinale y destacó la actuación de Joseph Fiennes, por dar vida a James Gregory, un sudafricano blanco quien escribió el libro del que se baso la obra.
Posteriormente, el cineasta Clint Eastwood adaptó a la pantalla grande el libro El factor humano: Nelson Mandela, del periodista británico John Carlin, bajo el título de Invictus (2009), que sigue la trayectoria del equipo de rugby de Sudáfrica en la Copa Mundial de 1995 que se realizó en dicho país. Morgan Freeman fue el histrión que encarnó a Madiba.
A esas le siguieron otras como Winnie (2011), con Terrence Howard como Mandela, y Mrs. Mandela (2010), con David Harewood en el papel principal, ambas sobre la vida que llevó con su esposa; y El joven Mandela (2012), del escritor y director británico Peter Kosminsky.
Finalmente, justo en el día de la muerte del ex presidente se realizó en Londres la premier de la nueva película sobre el líder sudafricano, Mandela: Long Walk to Freedom, la cual fue dirigida por Justin Chadwick y cuenta con la actuación estelar de Idris Elba como Madiba.
Nelson Mandela, en el séptimo arte: la lucha por la libertad