Al menos cinco personas resultaron heridas, entre ellas dos policías, y decenas más fueron detenidas durante las protestas en varias ciudades de Francia tras la muerte de un joven por una granada lanzada por un agente del orden en una manifestación.

En la noroccidental ciudad de Nantes, la protesta convocada por la muerte del estudiante Rémi Fraisse, el sábado pasado, degeneró en violentos enfrentamientos entre manifestantes y granaderos que se saldaron con cinco heridos, reportaron medios locales.

Entre los heridos figura un policía al que manifestantes le lanzaron ácido y un manifestante que resultó con la nariz fracturada. Los agentes de policía detuvieron al menos a 16 manifestantes, reportaron las fuentes.

En la manifestación, los participantes gritaron consignas como “policía asesina” o “policías, puercos, asesinos” y lanzaron botellas con ácido a los agentes.

La manifestación de Nantes, en la que participaron alrededor de 600 personas, la mayoría jóvenes estudiantes, fue la principal y la más violenta de la casi decena de protestas realizadas este sábado en toda Francia por la muerte de Rémi Fraisse por un granada policial.

En la sureña ciudad de Toulouse, alrededor de 600 manifestantes desfilaron por el centro de la ciudad para protestar por la muerte de Fraisse.

Algunos manifestantes destrozaron cajeros de banco, quemaron papeleras y rompieron mobiliario urbano. La policía reportó un balance provisional de ocho detenidos.

En la norteña ciudad de Lille, norte, un grupo de violentos lanzó bolas de acero contra la sede del Partido Socialista.

En un tono más pacífico, aunque con conatos de violencia se celebraron concentraciones de protesta por la muerte de Fraisse en otras seis ciudades francesas.

En un comunicado, el primer ministro francés, Manuel Valls, condenó esta tarde “con firmeza” los actos “graves” de violencia ocurridos, a los que calificó como un “insulto a la memoria de Rémi Fraisse”.

El miércoles pasado, en París, un total de 33 personas fueron detenidas, luego de su participación en una protesta que degeneró en disturbios entre policías y manifestantes.

La investigación previa concluyó que Fraisse murió al caerle una granada lanzada por la policía, lo que generó fuertes críticas al gobierno y la convocatoria de manifestaciones de protesta por toda Francia en los últimos días.

Debido a la muerte del estudiante, el gobierno francés decidió anular esta semana un proyecto de construcción de un embalse en el sur del país, causa por la que se manifestaba Fraisse.