“Sí se pudo, pero la lucha por una reforma migratoria sigue”

Los principales líderes y activistas proinmigrantes de EU seguían ayer celebrando el alivio administrativo anunciado el jueves por el presidente Barack Obama, pero también advirtieron de que se trata de una medida temporal, que concede tres años a los inmigrantes para que regularicen su estancia en el país. En este tiempo desaparece el fantasma de la deportación, pero no despeja la amenaza de que cuando llegue un nuevo inquilino a la Casa Blanca, a partir de enero de 2017 no extienda esta acción migratoria medida y deje de nuevo a millones de inmigrantes desamparados.
“Aunque esta semana se gritó ¡Sí se Pudo! desde hoy se gritará ¡La lucha continúa!”, dijo ayer Angélica Salas, directora ejecutiva de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA, en inglés), quien recordó que el objetivo final es seguir presionando para que el Congreso convierta en ley la reforma migratoria que defienden tanto Obama como los legisladores demócratas y algunos republicanos.
Para otra veterana activista, Dolores Huerta, ahora sigue una etapa de fuerza política. “Tenemos que elegir un Congreso que sea más favorable y nos apoye para aprobar una ley en Estados Unidos de reforma de inmigración para ayudar a todos”, declaró.
“Preocupación”. Otros que no están dispuestos a bajar la guardia son los beneficiados por la Acción Diferida (DACA, en inglés), otra medida ejecutiva que tomó Obama en 2012 para evitar la deportación de jóvenes estudiantes.
Los beneficiarios del DACA consideran que el presidente se quedó corto, pues esperaban que también les ofreciera una opción para obtener una residencia permanente.
“Un permiso de trabajo ayuda y estamos contentos por ello, pero no sabemos qué va a pasar con nosotros dentro de dos años y esa expectativa se está convirtiendo en una gran preocupación”, dijo Arnoldo Gómez, de origen mexicano.
Plan “inteligente”. El diario The New York Times aseguró ayer en un editorial que se trata de un plan “inteligente” que debe hacerse realidad.
“La iniciativa del señor Obama es un verdadero avance, que debe imponerse frente a la reacción de los republicanos”, opinó el diario, que destacó la decisión de que la policía deje de perseguir a inmigrantes en situación irregular para su deportación, centrándose sólo en aquellos que plantean un peligro para el país.
Al mismo tiempo, advierte que intentos similares fracasaron en el pasado y subraya que aún no está claro cómo se va a terminar con los abusos.
Para The New York Times, la acción presidencial abre interrogantes, pero se trata en todo caso de preocupaciones positivas y permitirá, al menos, terminar con “el miedo en las comunidades inmigrantes”.
“Sí se pudo, pero la lucha por una reforma migratoria sigue”