El coordinador de los diputados del PRI, Manlio Fabio Beltrones, dijo que es necesario otorgar para 2015 un presupuesto acorde con las reformas para dar soporte a los nuevos órganos y programas, así como para alentar el crecimiento económico y necesidades sociales.

En un comunicado, señaló que con la promulgación de las leyes secundarias de la reforma energética se completa un ciclo y comienza otro que deberá contar con el soporte presupuestal necesario para lograr su instrumentación inmediata y eficaz.

Destacó la importancia de las 10 acciones anunciadas por el presidente Enrique Peña Nieto para poner en marcha cuanto antes la transformación del sector energético.

Dijo que para lograr esas acciones se requerirá de un diseño presupuestal específico para darles continuidad y concretar su operación, como es el caso de la creación de los organismos sectorizados y órganos reguladores.

Además, para los programas y fondos especiales que se derivan del nuevo modelo de administración de la renta petrolera, sin olvidar los recursos destinados a fortalecer a las entidades federativas.

Expuso que se requiere de un replanteamiento del esquema tradicional de cómo se manejaba la aprobación del presupuesto de ingresos y egresos de la federación para la distribución del presupuesto anual.

Sin embargo, con el nuevo modelo, no debe implicar un gasto excesivo, sino la asignación adecuada y la aplicación productiva de los recursos para estimular el crecimiento económico y atender las necesidades sociales de la mayoría de la población, lo que significa no gastar más sino gastar mejor, con criterios de ahorro y transparencia.

Beltrones Rivera señaló que es urgente echar a andar la reforma, misma que deberán reflejarse en la Iniciativa de Ley de Ingresos y el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación que hará llegar a la Cámara de Diputados a más tardar el 8 de septiembre, los cuales se debe analizar y, en su caso, aprobar a más tardar el 15 de noviembre, plazo que establece la Constitución.

Además deberán considerarse las nuevas necesidades que plantea el reforzamiento de la autoridad electoral con el nuevo Instituto Nacional Electoral (INE) y del sistema de acceso a la información pública.

También, las reformas económicas y de telecomunicaciones, completan el proceso de transformación nacional para elevar la productividad del país, impulsar el crecimiento económico, fortalecer los derechos de los mexicanos y reivindicar el régimen democrático y de libertades.

“El primer periodo del tercer año legislativo que iniciará el 1 de septiembre, será nuevamente de intensa actividad legislativa, pues el ritmo de trabajo que ha caracterizado a la actual legislatura no admite pausas”, agregó.