Durante el penúltimo día de sesiones del periodo extraordinario en el Senado de la República, se discutió el proyecto de Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos, mediante el cual se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley Federal de Derechos y de la Ley de Coordinación Fiscal y se expide la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la estabilización y el Desarrollo.

Dentro de esta sesión extraordinaria de seis horas, los senadores se pronunciaron a favor y en contra de dicha ley, antes de pasar a su votación en lo general y después en lo particular.

Antes de la sesión, Miguel Barbosa, coordinador perredista de los senadores, presentó lo que se denominó como “la marquesina de la defensa del petróleo en México”,  desde los ventanales de la fracción  del sol azteca en el edificio sede de la Cámara alta, se observaron las iniciales del PRI y del PAN, seguido de la frase “México No Los Perdonará”. Barbosa resaltó que así es como su partido da el debate en el proceso legislativo, en el cual se prevé sean desahogados los dictámenes de la contenido fiscal de la reforma energética.

A decir del priista y presidente de la Comisión de Hacienda, José Yunes Zorrilla, con la nueva normatividad se reduce la carga fiscal de Pemex al eliminar tres de los seis derechos aplicables en la actualidad y conservar sólo el pago por el derecho de utilidad compartida con una tasa del 65 por ciento.

De acuerdo al legislador priista, el Fondo servirá como medio de recepción y ejecución de los pagos en las asignaciones y en los contratos para la exploración y extracción de hidrocarburos, con facultades para orientar los recursos a condiciones de ahorro de largo plazo y a inversión productiva.

Durante la sesión, los senadores Carlos Romero Deschamps, del PRI y los panistas, Javier Lozano y Ernesto Cordero, sólo hicieron acto de presencia, prefirieron no hacer uso de la tribuna para fijar su postura a favor o en contra de la referida minuta.