José María de Tavira revela los misterios de Niño Santo
“Más misteriosa y llena de suspenso”, así describe la segunda temporada de la serie Niño Santo el actor José María de Tavira, uno de los personajes clave en el desarrollo de la trama sobre el misterio del también llamado “niño de los milagros”, de cara a su estreno el próximo 7 de febrero a las 22:00 horas por el Canal Once, con repetición los domingos a la misma hora.
“En esta segunda temporada ya no hay una introducción al mundo de Aguazul, sino que entramos de lleno, sin necesidad de presentar al pueblo o al niño de los milagros, lo que pasa es que las relaciones y las circunstancias se van retorciendo para hacer una trama cada vez más misteriosa y llena de suspenso”, explicó José María de Tavira en entrevista con Crónica.
“Somos los mismos personajes y a algunos los vamos a conocer más a fondo y a otros los conoceremos menos porque se vuelven más misteriosos. En el caso de Damián, quien es mi personaje, vamos a enterarnos cada vez de más cosas, pero vamos a saber menos sobre él”, comentó.
La historia comenzó cuando un mortal brote epidémico afectó la zona sur del país, por lo que las autoridades políticas y sanitarias enviaron un grupo de tres jóvenes médicos a vacunar a la gente de toda la región y enseñarles medidas sanitarias de prevención. Lucía, Damián y Farca durante su trayecto atraviesan un pueblo llamado Aguazul, donde la población se resiste a su visita, incluso el médico encargado de ese poblado les advierte que no intenten vacunar a sus habitantes, pero los jóvenes no escuchan y se embarcan rumbo al que será el último pueblo de su ruta.
Construcción del personaje. José María de Tavira, quien comparte créditos en la serie con actores como Harold Torres, Gerardo Taracena, Gabino Rodríguez, Francisco de la Reguera, Karla Souza, Inés de Tavira, Noé Hernández y Dagoberto Gama, entre otros, explicó que para adentrarse en el mundo del niño santo debió tener la mente en blanco.
“Para la primera temporada era un doctor que llegaba a este mundo desconocido, y para abordar mi papel decidí ser tan ignorante como el personaje, ni siquiera quería preguntarle a los escritores sobre el proyecto, lo que busqué fue experimentarlo para darle veracidad al personaje y ser espontáneo, pero en la segunda temporada el personaje cambia radicalmente porque se entera de muchas cosas y por ende yo también traté de enterarme más y los escritores me contaron todos los secretos de la serie”, explicó de Tavira.
“Lo que tiene Damián en la serie es que está convencido de que es un hombre de ciencia, y sin embargo el niño lo cura y el hecho de que Damián sea capaz de decir ‘yo sé por qué ocurre todo pero esto es nuevo y me prueba lo contrario, tengo que buscar una manera para darle sentido’, eso es un gran esfuerzo, le da el golpe a una nueva realidad, a través de mucho valor, es ahí donde me identifico con mi personaje… en la segunda temporada no me puedo identificar con él porque es un héroe y yo soy un cobarde”, adelantó el histrión.
Postura. De acuerdo con el actor, la historia, que en su nueva temporada no sólo cambia en el aspecto dramático sino que en el visual (en la primera temporada había mucha acción, con un tono más agitado y en la temporada que llega se vuelve más contemplativo intimista), ayudó a de Tavira a reafirmar su postura respecto a la interminable lucha entre la ciencia y la religión.
“Yo no creo en fantasmas, ni en Dios, ni en las almas, ni en las vibras, ni en el ratón de los dientes… sin embargo, los chamanes de los que hablamos muchas veces curan (…) eso me inspiró a documentarme y me puse a investigar todos los elementos que tuve a mi mano en Internet y la literatura científica sobre el efecto placebo para entender a los chamanes; y estudié más de neurología para entender como es que los seres humanos podemos imaginarnos cosas a veces. Los milagros existen pero de ahí a que una cosa divina haya sucedido, no me parece que sea posible”, concluyó.
José María de Tavira revela los misterios de Niño Santo