La radio comunitaria “Nawayolliztlahtolli” busca fortalecer su cultura y lengua materna

Benito Juárez Ramírez

Tehuipango, Ver.- Han pasado cinco años y en este breve tiempo, la radio comunitaria “Nawayolliliztlahtolli” (La voz del alma náhuatl), se ha identificado con comuneros de seis municipios de la sierra de Zongolica y parte de la sierra de Puebla.

El director de esta radiodifusora, Gerardo Chipahua Macuixtle, dijo que los permisos ante las autoridades de Telecomunicaciones está en trámite y aunque les preocupa cumplir con la normatividad, carecen de los recursos económicos suficientes para poseer unas instalaciones en forma.

Transmiten desde un salón de la iglesia “Santiago Apóstol” con la autorización del párroco Lidio Limón López, quien también es impulsor de este medio de comunicación.

Armando Calihua Temoxtle y Saúl Macuixtle Calihua, fundadores de esta radio, afirmaron que el 14 de febrero del 2010, un grupo de jóvenes y señoritas de la parroquia de Tehuipango tuvieron la idea de usar el sistema de altavoces del templo para tener un sistema de entretenimiento, de transmitir información importante a la comunidad, saludos a los comerciantes y la gente que salía después de la misa.

Ese proyecto dio magníficos resultados, pues tres meses después, en mayo de ese mismo año, se fundó legalmente la asociación civil “Nawayolliliztli” e inició la idea de madurar una radio comunitaria en forma, con el objetivo de transmitir la identidad de la sierra de Zongolica para fortalecer la cultura, las tradiciones y sobre todo para preservar la lengua materna.

Después de que el padre Limón López consiguió con unos amigos de Zongolica y la ciudad de México, un aparato transmisor se logró cristalizar este proyecto, lo que significó que, para finales del 2010, este municipio ya tuviera su pequeña transmisora y con el apoyo de algunos profesionales de la comunicación, comenzó a crear su barra de programación y un sistema de trabajo.

Chipahua Macuixtle afirmó que para continuar con este proyecto “nos estamos apoyando en nuestro derecho de autonomía como miembros de un pueblo indígena y eso nos ha dado la fortaleza legal para seguir trabajando sin ningún fin de lucro, sólo sirviendo a la gente de la comunidad”.